A diferencia de otros auriculares de tapón, el diseño de los EarPods se basa en la anatomía del oído, por eso resultan más cómodos que cualquier otro auricular de este tipo.
Los altavoces de su interior reducen al mínimo la pérdida de sonido al tiempo que aumentan la potencia acústica. El resultado es un audio de una calidad extraordinaria.
Los EarPods también incluyen un mando integrado en el cable para ajustar el volumen, controlar la reproducción de música y vídeo y responder o colgar llamadas.